Los perros, esos fieles amigos de cuatro patas, son una constante fuente de alegría, sorpresa y, a veces, desconcierto. Desde el cachorro más juguetón hasta el perro más sereno, todos tienen algo en común: esos comportamientos graciosos que hacen los perros y que nos hacen sonreír, reír e incluso rascarnos la cabeza preguntándonos, ¿Por qué ha hecho eso?.
Mientras algunos de estos gestos son universales, otros son únicos y distintivos de cada perro. Pero lo cierto es que, ya sea una costumbre especial que solo tu amigo peludo tiene o una actitud que todos los canes parecen compartir, detrás de cada uno de estos comportamientos hay una razón de ser.
Acompáñanos en este fascinante recorrido por 10 comportamientos graciosos que hacen los perros y descubre el misterio detrás de sus acciones más encantadoras.
10 Comportamientos graciosos que hacen los perros
1. Perseguir su cola
Perseguir la cola es un comportamiento curioso y común en perros, especialmente en cachorros, que a menudo lo hacen por juego y descubrimiento. Sin embargo, en perros adultos puede indicar aburrimiento, necesidad de atención y en otros casos menos frecuentes, problemas de salud como afecciones cutáneas, neurológicas o glándulas anales impactadas. Si un perro persigue su cola con frecuencia o de manera obsesiva, es recomendable consultar a un veterinario para determinar la causa y recibir orientación sobre cómo manejar el comportamiento.
2. Correr frenéticamente
¿Tu perro corre frenéticamente de un lado a otro sin razón aparente? Uno de los comportamientos graciosos que hacen los perros son los llamados Zoomies o Fraps, esos rápidos estallidos de energía que a menudo les sirven como forma de liberar energía acumulada o excitación. Estos episodios, frecuentemente en círculos, pueden ser desencadenados por una acumulación de energía, instintos de caza, la sensación de estar mojado tras un baño, o pura excitación. Es un comportamiento típicamente normal, especialmente en cachorros y perros jóvenes, pero es esencial garantizar un entorno seguro durante estos estallidos y considerar más ejercicio si ocurren con demasiada frecuencia.
3. Rodarse en cosas con olores fuertes
Rodarse en olores fuertes es un comportamiento ancestral de los perros, heredado de sus antepasados como los lobos. Originalmente, este comportamiento tenía funciones como camuflar su olor durante la caza, comunicar información al grupo y satisfacer su curiosidad. Aunque los perros domésticos ya no necesitan disfrazar su olor para cazar, el instinto persiste. Los perros pueden sentirse atraídos por olores intensos por naturaleza, y este acto puede ser tanto una forma de investigar el aroma como una manera de marcar su presencia en un área determinada. Aunque tu perro doméstico no necesita cazar, el instinto todavía persiste.
4. Llevar la comida fuera del plato
El curioso comportamiento de algunos perros de llevar comida fuera de su plato se remonta a sus ancestros salvajes, que a menudo movían y escondían su presa para protegerla de otros depredadores o para guardarla para más tarde. Aunque los perros domésticos no enfrentan estas mismas amenazas, el instinto persiste. Para algunos perros, puede ser simplemente una preferencia o hábito, mientras que para otros puede ser una manifestación de un comportamiento ampliado de esconder objetos. Si bien es una conducta natural, cualquier cambio repentino en este comportamiento o la aparición de otros signos de ansiedad debe ser consultado con un profesional.
5. Ladrar a objetos inanimados
A veces, un objeto nuevo o desplazado puede parecer sospechoso para un perro. Ladran para advertir sobre posibles amenazas o simplemente por confusión. Este comportamiento puede estar influenciado por su percepción visual única, experiencias pasadas con objetos similares, una invitación juguetona al objeto o incluso el refuerzo de recibir atención de sus dueños cuando ladran. Es esencial para los propietarios reconocer que este ladrido no siempre es signo de agresión o miedo y abordar el comportamiento adecuadamente si se vuelve problemático.
6. Mirarte mientras hace sus necesidades
Unos de los comportamientos graciosos que hacen los perros, a la vez que embarazoso, es cuando un perro te mira mientras hace sus necesidades, refleja un estado de vulnerabilidad, heredado de sus antecesores salvajes que estaban expuestos a amenazas durante esos momentos. Mirar al dueño puede ser una búsqueda de protección, una forma de comunicarse y buscar aprobación, o simplemente una manera de establecer una conexión visual y social. Para el perro, la reacción del dueño es esencial, si el dueño se muestra tranquilo y relajado, el perro se sentirá más seguro, mientras que si percibe tensión en el dueño, puede sentirse inquieto.
7. Empujar su comida con la nariz
El comportamiento de los perros de empujar su comida con la nariz, imitando el acto de enterrarla, proviene de su antecesores evolutivos, los lobos, quienes ocultaban excedentes de comida para consumirla posteriormente en tiempos de escasez. Aunque los perros domésticos no necesitan guardar su comida para más tarde, este comportamiento instintivo puede manifestarse ocasionalmente. Si un perro muestra este comportamiento repentinamente o con frecuencia, podría indicar problemas de salud, por lo que es recomendable consultar a un veterinario.
8. Inclinar la cabeza cuando hablas
Aunque no estamos seguros del todo de por qué lo hacen, se cree que puede ser para escuchar mejor o intentar comprender lo que estamos diciendo. Cuando los perros inclinan la cabeza al escucharnos, podrían estar ajustando sus orejas para captar el sonido con mayor claridad o intentar obtener una vista sin obstrucciones de nuestro rostro para leer mejor nuestras expresiones. Este comportamiento también puede ser producto de refuerzos anteriores; es decir, si se les ha premiado o elogiado por este gesto adorable, podrían repetirlo. Independientemente de la razón exacta, este gesto indica que el perro está prestando atención y busca entender o conectarse con su dueño.
9. Morder el agua que sale de la manguera
Los perros a menudo se sienten atraídos por los movimientos rápidos y reflejantes del agua pueden incitar el instinto de juego o caza de un perro, haciéndoles querer atraparla. La combinación de estímulos visuales y auditivos del agua en movimiento puede ser intrigante, y para muchos perros, el agua se convierte en un desafío en movimiento que buscan capturar. Sin embargo, es esencial supervisar este juego, ya que el agua a alta presión puede ser perjudicial y la ingestión excesiva puede llevar a problemas de salud.
10. Sentarse en tus pies o en tu regazo a pesar de ser grandes
Los perros a menudo se sientan en los pies o regazos de sus dueños como una forma de mostrar cariño y confianza. Este comportamiento también puede tener raíces territoriales, ya que al hacerlo, pueden estar marcando a su dueño con su olor. Además, algunos perros, sin ser plenamente conscientes de su tamaño al crecer, pueden buscar el confort que experimentaban cuando eran cachorros y se acurrucaban junto a otros. Es esencial para los propietarios comprender este comportamiento y, cuando sea necesario, establecer límites, especialmente con perros más grandes.
Los perros, con sus comportamientos graciosos, iluminan nuestros días. Al comprender las razones detrás de sus acciones, fortalecemos el vínculo con ellos. Ya ves que ¡Nunca hay momento aburrido cuando tienes a un peludo a tu lado!